Mitos de venas con varices

Aclaremos 7 mitos comunes de las varices.

Para ayudarle a entender mejor a cerca de la enfermedad de las venas, más conocidas como varices, decidimos que era tiempo de aclarar la mal información existente. Hay muchos mitos a cerca de esta condición vascular, incluyendo quien puede tener varices, como se ve esta enfermedad, como se desarrolla y como se puede tratar. Por favor lea a continuación los mitos más comunes de la enfermedad y tal vez, se sorprenderá al encontrar que alguna de estas “perlas de conocimiento” se aplican a usted.

Mito 1: Tratamiento de varices requiere cirugía invasiva de stripping.

La terapia moderna, como muchos procedimientos y terapias médicas, se ha transformado en algo mínimamente invasivo. Es común que los procedimientos sean realizados en clínicas, y que los pacientes se vayan a casa, al trabajo, de compras o almorzar, inmediatamente después, dependiendo del procedimiento y del paciente. En días históricamente obscuros en tratamientos de várices, el tratamiento más común fue un procedimiento quirúrgico llamado “Stripping venoso” que consistía en hacer una incisión a lo largo de la vena para removerla.

La cirugía de stripping de venas era realizada en hospitales, porque requería anestesia general y ser admitido al hospital para ayudar en el control de dolor y larga recuperación. De esa cirugía usted terminaba con una cicatriz a lo largo del lugar donde estaba la vena y desafortunadamente esto estimulaba el crecimiento de nuevas venas en el lugar. Muchas personas siguen pensando en stripping de venas como tratamiento venoso, siendo que esta terapia no es usada en su mayoría en esta era modera.

Dos de las tres modalidades de tratamientos de varices no requieren incisiones. Ablación termal endovenosa (termino ATEV) usa una variación de energía calórica que cierra veras de alto calibre y venas rectas que generalmente son la fuente de venas adicionales de acceso de 3mm en la parte inferior de la pierna de incisiones adicionales con anestesia local. Después que las venas rectas son tratadas con ATEV, inyectamos escleroterapia por guía de ultrasonido con medicamento de jeringas muy pequeñas directamente a las venas cerrándolas. Utilizamos escleroterapia para cerrar venas que son tortuosas o muy pequeñas para ser tratadas con ATEV. También usamos escleroterapia cosmética en venas arañas y venas reticulares con acceso visual por medio de agujas increíblemente pequeñas.
Flebectomía ambulatoria en el IVC, requiere pequeñas incisiones, se reserva solo para las venas abultadas restantes, después de todos los tratamientos, si no son removidas causan descoloración siendo parte del tratamiento.

Flebectomía Ambulatoria (abreviado FA) es una serie de pequeñas incisiones de 1-3mm de largo, esto permite acceder la vena con un instrumento especial que tira la vena hacia la superficie de la piel. La mayoría de nuestros pacientes no necesitan FA después de haber pasado por los otros procedimientos. FA se hace en nuestra oficina con anestesia local y suplementada con medicamentos ansiolíticos, como Valium o gas nitroso. El procedimiento es tolerable, muchos pacientes ven televisión o juegan con su teléfono mientras trabajamos. La mayoría de nuestros pacientes vuelven rápidamente a sus actividades regulares. Las incisiones son mínimas y dejan, si dejan, una cicatriz muy pequeña.

Nuestros pacientes dicen que el procedimiento es tolerable, mucho más de lo que pensaban y que la recuperación es buena y no tiene un gran impacto en sus vidas. Muchos se preguntan porque no vinieron antes para dejar de vivir con el dolor que generan las várices e insuficiencia venosa.

Mito 2: La recuperación del tratamiento de varices es muy difícil.

Muchos pacientes se sorprenden al tener una recuperación muy buena después de los procedimientos de várices. Recomendamos a los pacientes caminar y mantenerse activos después del tratamiento, solo evitando actividades agotadoras, así como correr y levantar pesas. Muchos pacientes retornan al trabajo y actividades del hogar el día después del tratamiento y algunos hasta vuelven a sus actividades el mismo día del tratamiento.

Puede volver a ejercitar, correr y levantar pesas después de una semana del tratamiento. El dolor se controla típicamente con medicamentos como ibuprofeno y acetaminofén. Aparecerán moretones en el lugar del tratamiento y luego al tener FA. Use compresas frías o calientes, estas ayudaran con molestias locales en moretones.

El usar medias de compresión, esencialmente medias con grado de compresión prescrito, continuamente por 48 horas después del tratamiento y luego por 5 días mientras este despierto es un requerimiento para la mayoría de nuestras terapias esto asegura que la vena se mantenga cerrada. Hay una alternativa a ATEV que no requiere medias de compresión, y solo requiere una inyección anestésica local para acceder a la vena a tratar, pero actualmente este tratamiento no es cubierto por seguros médicos y debe ser pagado de su bolsillo.

Mito 3: Cruzar las piernas causa la formación de várices.

El cruzar las piernas no causa formación de várices. Cuando las personas cruzan las piernas, obstruyen temporalmente el flujo venoso y produce síntomas, esto genera una falsa asunción que el cruzar las piernas produce várices. Hay factores que contribuyen al desarrollo de várices, que son mencionadas a continuación, pero primero debemos entender que es lo que realmente causa varices.

La causa de varices es causada por problemas en las válvulas de las venas que generalmente facilitan el movimiento de la sangre de vuelta al corazón, esta falla en las válvulas conlleva el retorno insuficiente de la sangre al corazón y flujo reverso “reflujo venoso”. Al no tener una mejor descripción se podría decir que la sangre se devuelve dentro de la vena. Este proceso es llamado “Insuficiencia venosa”. Las venas se deforman con el tiempo, lo que causa que más venas se enfermen. Este proceso es auto perpetuo en el progreso de la enfermedad. Las venas deformadas por una presión anormal causan una respuesta inflamatoria y liquido se filtra en el tejido de la piel resultando en los síntomas de várices, dolor, pesadez, presión, picazón, cansancio en las piernas, hinchazón/edema y hasta pernas inquietas.
Estar de pie puede llevar a descoloración y engrosamiento de la piel. En casos extremos, puede ocurrir ulceración o que una vena se abra por la presión. Los factores de riesgos en fayas valvulares y várices incluyen genética, (la más significante) edad, obesidad y embarazos. Ocupaciones donde está parado o sentado por periodos largos tienen una mayor tendencia a sufrir de varices.

Factores de riesgos en varices:

  • Genética: Casi un 50% de pacientes con historial familiar de varices.
  • Genética: Si padre y madre tienen varices, hijos tienen un 90% de posibilidad de tener varices en sus vidas.
  • Genética: Si uno de los padres es afectado, hijas tendrán un 60% e hijos un 25% de posibilidad de tener varices.
  • Mujeres: El predominio es mayor en mujeres (55%) comparado a hombres (45%).
  • Edad: Se estima que un 41% de mujeres sobre los 50 años de edad tienen varices y un 50% de la populación de EEUU sobre los 50 años tienen varices.
  • Obesidad: Mujeres que están sobre peso moderadamente (BMI 25-29.9) tienen un 50% de riesgo de formar varices, comparado a mujeres que no están sobrepeso. Mujeres con BMI mayor a un 30 son 3 veces más propensas a formar várices.
  • Embarazo: Mujeres tienen un 21-32% más propensas a tener varices si han estado embarazadas a las que no, a la misma edad.
  • Embarazo: Mas de un 70% de las mujeres tienen evidencia de varices mientras están embarazadas.

Mito 4: Solo las abuelas tienen várices.

Hay pacientes con várices de todas edades, formas, porte, raza y género. Lo cierto es que la mayoría de las personas cuando piensan en varices piensan en sus abuelas o la tía abuela que tenía “malas venas” o que nunca usaba shorts o faldas porque les daba vergüenza como se veían las venas abultadas que parecían cuerdas en las piernas.

Aunque es cierto que es más común ver que varices incrementan con los años, pacientes pueden sufrir de varices a cualquier edad o estado en la vida. Hay más de 40 millones de personas es los Estados Unidos con varices y no todas son abuelas. Un gran número de nuestros pacientes tuvieron los primeros síntomas en la secundaria o en su primer embarazo y los problemas de venas han crecido con los años. La severidad de la enfermedad de varices solo incrementa con los años a no ser que el curso sea alterado por la intervención o modificación de estas. Nosotros rutinariamente vemos pacientes con vidas activas, saludables y pacientes jóvenes con dolor de venas que no se ven a simple vista y limitan sus actividades diarias. En nuestra populación particular, donde vemos familias grandes de muchos niños, vemos madres jóvenes con enfermedad venosa avanzada seguido de múltiples embarazos. Aunque la mayoría de nuestros pacientes son mujeres, hasta un 30-40% de nuestros pacientes son hombres en cualquier estado de sus vidas, estudios muestran que hombres son más propensos a tener problemas de venas medianos y crónicos que mujeres, pero menos probables en buscar ayuda por medio de tratamientos. La abuela amorosa con venas y medias sueltas no necesariamente muestran la realidad de la enfermedad.

Mito 5: Tiene que esperar hasta terminar de tener hijos para tratarse las varices.

“¿Debo esperar?” Es una de las preguntas más comunes que madres jóvenes nos hacen en IVC esperando tener uno o 2 hijos más. La respuesta es enfáticamente no.

Primero que todo sufrir en el embarazo y varices es miserable. El tratar ahora limitaría significativamente dolor en embarazos subsecuentes. Segundo si la mujer tiene varices solo empeorará durante embarazos y requerirá una mayor cantidad de tratamientos necesarios. Adicionalmente algunos cambios de largo plazo pueden desarrollarse que no podremos mejorar completamente o ser tratados. El tratarse antes de su próximo embarazo disminuirá el proceso, mientras está embarazada, la enfermedad puede que aparezca nuevamente de todas formas. Y, por último, vemos pacientes que nos dicen que les han dicho que no pueden tener más hijos por sus varices. Esto puede que no sea verdad. Si les han dicho esto, venga a visitarnos antes de dejar de tener hijos por esa razón. Le podremos ayudar.

Adicionalmente, mujeres pueden tener insuficiencia venosa en la pelvis, muchas veces se le llama ‘síndrome de congestión pélvica’ – esencialmente son venas alrededor de los ovarios y útero con insuficiencia venosa en los ovarios y venas iliacas que se puede extender a la zona bulbar y piernas. Los síntomas pueden incluir dolor en la parte baja de la espalda y pelvis o pesadez que empeora al fin del día, al hacer actividades pesadas y mientras menstrua. También puede ser asociado con relaciones sexuales dolorosas lo que puede hacer que quedar embarazada sea menos agradable. También puede asociarse a desfiguración de válvula labial. El dolor puede limitar severamente su estilo de vida. Puede ser insoportable mientras está embarazada. Esta enfermedad muchas veces no es diagnosticada o es diagnosticada equivocadamente; en todo caso nosotros podemos diagnosticar y tratar insuficiencia venosa pélvica. Los tratamientos son poco invasivos y requieren un mínimo tiempo de descanso. Llámenos, si tiene síntomas y piensa que son asociados a várices en su pelvis. Nosotros podemos hacer que su próximo embarazo sea mucho más tolerable. No podemos tratar mientras está embarazada por riesgo al bebe, pero podemos darle recomendaciones y prescribir medias de grado de compresión para ayudar a los síntomas mientras está embarazada. Podemos verla en una consulta, facilitar tratamiento y pre autorizar con su seguro para después de que nazca su bebe.

Mito 6: Las varices es solo un problema cosmético.

Si ha leído cualquiera de las anteriores, está de acuerdo que las varices y cosmético, probablemente no deberían ser usadas en la misma frase. Los tratamientos varicosos son medicamente necesarios y mejoran la calidad de vida. Afortunadamente años de estudios muestran esta necesidad y las compañías médicas están de acuerdo.

El propósito de nuestra clínica es diagnosticar y tratar la enfermedad varicosa para mejorar síntomas, restaurar flujo normal funcional venoso y que nuestros pacientes vuelvan a sus vidas normales sin las limitaciones de las várices. La apariencia cosmética de las piernas mejora con los tratamientos especialmente para pacientes con venas abultadas, a no ser que haya tenido ulceraciones y cambios significativos en la piel. Tratamientos mejoraran los síntomas, ayudan a que las ulceras cierren y hasta pueden parar el progreso de la enfermedad.

También tenemos tratamientos de escleroterapia para venas arañas y venas reticulares que son sintomáticas (que pican y son sensibles). Los seguros médicos no están de acuerdo con esto y consideran este tratamiento de una naturaleza cosmética. Estos no son cubiertos por seguros médicos y los gastos deberán ser pagados por usted.

Mito 7: Las varices son siempre visibles.

No son siempre visibles. Hay venas abultadas visibles que muchas veces son una muestra obvia de insuficiencia venosa, estudios muestran que la mitad de la populación adulta tienen signos y síntomas menores de la enfermedad (mujeres 50-55%, hombres 40-50%), menos de la mitad de estos pacientes tienen várices visibles (mujeres 20–25%; hombres 10–15%). Hay síntomas específicos que indican presencia de la enfermedad subyacente, llamado insuficiencia venosa crónica. Estos síntomas incluyen dolor de piernas, picazón, presión, pesadez en las piernas, hinchazón de piernas, cambios en el color de la piel, coágulos superficiales, ulceraciones y síndrome de pierna inquieta.

Hay otras enfermedades que el proceso pueden ser similares a los síntomas de varices, en IVC ofrecemos exámenes gratuitos que podrá decir si los síntomas que experimenta son por varices. No hay obligación alguna de seguir con una consulta o tratamiento y rutinariamente por medio de estos ultrasonidos vemos pacientes que tienen síntomas, pero que no tienen varices. También vemos un gran porcentaje de paciente que han sufrido de varices por mucho tiempo y por un pequeño examen sus vidas cambian, con los tratamientos que se han hecho con nosotros. Por favor llame para tener un examen de ultrasonido o una consulta completa si tiene los siguientes síntomas:

  • Venas Visibles o no visibles
  • Dolor o molestia de piernas sin otra explicación
  • Presión o pesadez en las piernas
  • Picazón de la piel
  • Inflamación o edema en pernas
  • Piernas cansadas o fácilmente fatigadas
  • Sangramiento espontaneo de una várice
  • Cambio en el color, incluyendo pigmentación o espesor de la piel
  • Coágulos superficiales
  • Ulceración
  • Síndrome de piernas sin descanso

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